Posteado por: cercadeafrica | 16/12/2010

Ese largo momento del té

Estoy recordando una tarde en Senegal, en una aldea cerca de Saint Louis. Nuestro guía nos ha invitado a su casa. Hemos comido tiébou dienne, un plato típico del país, parecido a la paella española: arroz, aderezado con carne, pescado, verdura. Riquísimo.

El ambiente es de lo más relajado. Las casa es grande y abierta. Consta de un gran patio central y habitaciones alrededor, con un porche. Sencillo pero todo muy limpio y ordenado. En el porche nos sentamos los cuatro alrededor de la comida, con nuestro guía. Su mujer come cerca, con el resto de las mujeres de la familia. Es la costumbre. Los niños corretean cerca, un poco temerosos porque no nos conocen, pero les puede la curiosidad y no dejan de acercarse con una tímida sonrisa.

Pero quería recordar el momento posterior. Cuando te dicen que van a preparar el té. Salimos del porche. En la misma casa vive la familia de su hermano. Su hermano ha tenido un accidente de tráfico y temporalmente no puede trabajar. Está tumbado en una cama en el patio, jugando con los niños pequeños. Su mujer, al lado, ya ha comenzado el ritual que tanto nos gusta.

La mezcla del té con el agua hirviendo y el azúcar ya está en la tetera. Nos sentamos con ellos y observamos a su mujer concentrada en airear el té. Lo distribuye en los vasos y después vuelve a echar todo el contenido en la tetera. Una y otra vez. Sonreímos y comentamos que en Madrid no empleamos tanto tiempo a preparar el té. Tiene que estar delicioso porque volvemos a ver repetir una y otra vez la operación. Cuando creemos que ya está terminando… no. Le quedan unas rondas más. Dicen que cuanto más tiempo le dedican, mejor quieren prepararlo para agradar a sus invitados. Si ya estábamos agradecimos por la invitación, no sabemos como comportarnos ante tanta hospitalidad.

No hace falta decir que nos supo a gloria. Es uno de los momentos íntimos, en los que compartes miradas, sonrisas, gratitud, hospitalidad…

VMM


Respuestas

  1. Precioso instante. Este momento tuyo en Senegal me ha hecho recordar otro similar ritual del té en los campos de refugiados de Tinduf, en el Sáhara Occidental. Allí, al igual que sus hermanos senegaleses, los saharauis mantienen también una preparación larga y metódica. La dividen en tres fases, y por lo tanto, en tres tragos diferentes: ellos dicen, y efectivamente así es, que el primero sabe «dulce como la vida», el segundo «suave como el amor», y el tercero «amargo como la muerte». Todos muy calientes, porque contrarresta la temperatura corporal propia del desierto. Si sorbes muy fuerte, ni los labios ni la lengua se quemarán y la degustáción sera aún mejor.

    Como dices, grandes momentos.

  2. Hola de nuevo. Sigo tu blog y hace días que quería sugerirte que, en vez de «linkar» noticias, proverbios o vídeos de otras webs o blogs, personalmente apreciaría más leer testimonios personales, aunque sean tan sencillos pero agradecidos como éste.
    Así que, sólo me queda animarte a que sigas por esta línea y nos regales más sensaciones y experiencias vividas en primera persona. ¡Felicidades! Carles

  3. Sucran, y baraka por compartir esta experiencia que nos devuelve a la fragilidad de la vid a su belleza y nos hace recordar los tres tés en Argelia
    El primero amargo como los celos
    el segundo dulce como el amor
    y el tercero suave como la muerte.

    A tu salud,

  4. Hola Carles

    Tienes razón, ya que es complementario pero no para centrarlo solo en eso. El caso es que en estos meses me cuesta mucho sacar un rato para sentarme y escribir y tengo que obligarme un poquito, que es más enriquecedor.
    un abrazo

  5. Que momento tan bello el que relatas. Es cierto, nosotros no tenemos tiempo para dedicarnos a preparar el té con tanto esmero, ni siquiera para ser tan hospitalarios con nuestras visitas.
    Una pena.

    Saludos.

  6. Qué diferente concepción del tiempo, qué diferente forma de disfrutar de algo tan sencillo. Precioso momento, calmado, pausado, bello… justo lo que nos hace falta en esta sociedad nuestra, tan repleta de todo que no nos permite un instante de té.
    Gracias!


Replica a Carles Cancelar la respuesta

Categorías