Posteado por: cercadeafrica | 11/12/2011

Puerto de Santa María, Isla de Sal (Cabo Verde)

Fotografía: Verónica Malfeitos, 2011

Posteado por: cercadeafrica | 11/12/2011

Playa paradisíaca en Isla de Sal, Cabo Verde

Foto: Verónica Malfeitos, 2011

Posteado por: cercadeafrica | 11/12/2011

Un saludo desde un incomparable marco (Isla de Sal, Cabo Verde)

Foto: Verónica Malfeitos, 2011

Posteado por: cercadeafrica | 11/12/2011

Una sonrisa desde Cabo Verde

Foto: Verónica Malfeitos, 2011

Posteado por: cercadeafrica | 11/12/2011

Cabo Verde, isla de Sal (playa africana)

Foto: Verónica Malfeitos, 2011

Posteado por: cercadeafrica | 14/06/2011

Proverbios Africanos (XXXIII)

 Sin cosas bellas no podermos vivir

(Proverbio baulé)

 

VMM

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Posteado por: cercadeafrica | 07/06/2011

Proverbios Africanos (XXXII)

 

Cuando un hombre ciego está feliz

le da dinero a su hijo para que compre queroseno para la lámpara

 

VMM

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Posteado por: cercadeafrica | 02/06/2011

El final de una estética (sobre escarificación)

Fatima, la madre de estas dos niñas luce unos tatuajes de gran belleza en su rostro y cuello. Mariatu, su hija mayor sólo luce unos pequeños tatuajes en la frente y en la comisura de los labios para proteger su boca de la entrada de malos espíritus (enfermedades), y Zulatu, la más pequeña, tiene la cara ‘limpia’ de tatuajes.

Esta madre y sus dos hijas pertenecen a la etnia mbororo, un pueblo ganadero de creencias animistas pero que practica el Islam. Fatima vivió su niñez en la sabana del norte de Camerún, desplazándose con sus padres, abuelos, hermanos, y ganado de forma nómadica. Los primeros tatuajes que percibió la joven Fatima (10 años) fueron en su campamento nómada, y fue el curandero del pueblo quien se los hizo. El viejo marabú usó una especie de cuchila metálica, con la que marcó los diseños en el rostro, cuerpo y brazos de la niña. Acto seguido, cubrió los ‘dibujos’ cutáneos sangrantes de una especie de hollín azulado para que las marcas de belleza pudiesen resaltar del oscuro cuerpo. Ya en plena adolescencia, y antes de contraer matrimonio con un pastor de otro clan mbororo, Fatima siguió decorando su cuerpo con más tatuajes en los mercados semanales a los cuales acudía con sus hermanas para vender yogur y queso de sus vacas.

 Tras casarse, Fatima, fijó su residencia en Mbe, un pueblo grande habitado por etnias agricultoras del norte camerunés. Fue en esa época que las bellas marcas tribales en su rostro, que la definían como mujer, como mbororo, y como hija de Saliu, del clan mbororo de los Beka, pasaron a ser un elemento vergonzante para Fatima. Los vecinos cristianos de la familia de Fatima hacía años que habían abandonado la costumbre de embellecer su rostro y cuerpo con tatuajes o escarificaciones, era lo que llamaban cosas del pasado, cosas ‘sucias’ de cuando no estaban civilizados. La otrora orgullosa nómada empezó a cubrirse el rostro para acudir al mercado local y cuando tuvo a Mariatu tuvo claro que su hija no se tatuaría. La anciana madre de Fatima, insistió en sus venidas a Mbe, desde su lejano campamento nómada, que su nieta debía recibir al menos las ‘marcas’ rituales en la frente y en la comisura de los labios para protegerla de las enfermedades y para definir su condición de mujer mbororo. Fatima y su marido accedieron a la voluntad de la abuela, pero ya con la segunda hija, habiendo muerto la anciana, la tradición paró por completo.

La mirada etnográfica de Antonio sobre este grupo de mujeres-niñas mbororo pone de manifiesto un mundo que se acaba. Un mundo africano ancestral que vale la pena descubrir antes de que sea demasiado tarde.

JR

Fotografías en Camerún por Antonio Segura

Posteado por: cercadeafrica | 31/05/2011

Rooibos, infusión africana

Muchos de vosotros conocereis la infusión de roobois, sobre todo los aficionados al té. Lo que no sabía yo hasta el otro día es que es originario de Sudáfrica. En concreto, la tierra natal del rooibos es la meseta Bokkeveld en Sudáfrica a 400 km. de Ciudad del Cabo.

El té Rooibos o té del Arbusto Rojo, como también se lo conoce, no es verdaderamente un té, sino una hierba con muchos benificios a nivel de salud. No tiene cafeína y sólo la mitad de tanino que el té común. Además de ser una bebida refrescante, contiene minerales y poderosos antioxidantes.  En resumen:

– no irrita los riñones porque no pesee ácido oxálico

– tiene aspalatina, que contrarresta los procesos ateroescleróticos que llevan a las enfermedades cardíacas.

– las lociones capilares que contienen Rooibos aceleran el crecimiento del cabello y mejoran su condición general, sin ocasionar reacciones alérgicas.

– Contiene polifenol similar al del té verde. El polifenol ayuda a proteger al cuerpo del daño ocasionado por los radicales libres.

– Efectivo ante los problemas de salud en general: ayuda a aliviar problemas digestivos, náuseas, vómitos, retortijones y constipación. Al tener un efecto relajante, es beneficioso para la irritabilidad, el insomnio y la depresión.

– También ayuda en la dieta de las madres embarazadas: complementa la ingesta de manganeso, calcio y fluoruro. Ayuda a fortalecer los dientes y los huesos del bebé.

VMM

Fotos: gettyimages.es

Más información:

Rooibos, sabor y salud (web infusionistas)

Rooibos en manos de pequeños productores (web infusionistas)

Posteado por: cercadeafrica | 28/04/2011

Proverbios Africanos (XXXI)

 

Un  proverbio es el espejo de la comunidad

VMM

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